En los últimos años se han publicado numerosos estudios que relacionan el bisfenol A (BPA) con multitud de problemas de salud. El ultimo de ellos ha sacado la luz que beber de botellas de plástico podría elevar la presión arterial si están forradas con esta sustancia química.
Este material se suele utilizar en la fabricación de envases de alimentos como botellas, latas de conserva, tapones de bebidas, tapers de plástico y biberones de alimentación, además de encontrarse en las películas de protección utilizadas en el interior de latas de alimentos y bebidas.
A pesar de que jamás sha sido utilizado como un ingrediente por la industria alimentaria, suele contaminar la comida que entra en contacto con él, por lo que pasa al cuerpo humano. Su uso está tan extendido que incluso es habitual encontrarlo en la sangre humana, la orina, o en el líquido amniótico y la placenta.
El bisfenol A está clasificado como un disruptor endocrino: una sustancia que altera el equilibrio de las hormonas y que ha sido relacionadas con la aparición de múltiples y variados problemas de salud, como una mayor infertilidad, la aparición de cánceres hormonodependientes, y diabetes. También provoca reacciones negativas en los testículos incluso en pequeñas concentraciones, tal y como ha evidenciado una investigación realizada por la Universidad Paris Diderot (Francia) y publicada en la revista ‘Plos One’.
Muchos de los efectos anteriormente descritos han aparecido en ratas de laboratorio que han sido expuestas a este componente. Por dichos descubrimientos, países como Francia han prohibido por completo su uso en cualquier aspecto relacionado con la alimentación o el almacenamiento de comida.
Ahora un nuevo trabajo, realizado por Yun-Chul Hong, de la Escuela de Medicina de la Universidad Nacional de Corea del Sur, relaciona el consumo de agua proveniente de botellas de plástico recubiertas con bisfenol A con una aumento de la presión arterial y la variabilidad de la frecuencia cardiaca.
Alta concentración en latas
Para su estudio, Yun-Chul Hong preparó un ensayo con 60 adultos, en su mayoría mujeres mayores de 60 años. A cada participante se le proporcionó al azar leche de soja de dos maneras: en botellas de vidrio y latas. Más tarde, analizó su orina y se analizó su concentración de BPA, la presión arterial y la variabilidad de la frecuencia cardiaca dos horas después del consumo de cada bebida.
Lo que se encontró es que las personas que habían bebido en lata tenían una concentración de BPA en sangre hasta 1.600% superior que antes de empezar la prueba. Además, su presión arterial había aumentado considerablemente (5 mm Hg) y su frecuencia arterial se había acelerado.
Según advierte el autor del estudio, estos indeseables efectos pueden tener consecuencias fatales en personas que tengan problemas cardiovasculares.
El principal componente de los envases de plástico y el interior de las conservas, es el Bisfenol A, una sustáncia química que diversas investigaciones indican como causante de diversos tipos de Cáncer y otras enfermedades.
El Bisfenol A (BPA) es un componente monomérico de muchos plásticos y aditivos plásticos utilizados en la fabricación de plástico de policarbonato y resinas epoxi. Se encuentra comúnmente en botellas de plástico haciéndolas resistentes e inastillables como por ejemplo, botellas de agua. Las resinas epoxi que contienen Bisfenol-A se usan como recubrimiento en casi todas las latas de aluminio.
Recientemente el BPA ha sido incluido por el Servicio de Salud de Canadá en la lista de sustancias tóxicas. En el año 2008, Canadá había prohibido su uso en biberones de plástico de policarbonato y en los envoltorios de alimentos para bebés. Para esta decisión el gobierno de Canadá ha citado evidencia científica que afirma que el BPA puede actuar potencialmente como un disruptor endocrino, es decir, imita a las hormonas del cuerpo, en bajas cantidades. Dado que esta sustancia química es potencialmente capaz de afectar el equilibrio natural de hormonas del cuerpo, puede representar un riesgo para el desarrollo normal de un niño, además de aumentar el riesgo de contraer una gran variedad de enfermedades incluyendo la diabetes de tipo 2, el cáncer de seno y el cáncer de próstata. El compuesto también ha sido incluido también entre los posibles contaminantes obesogénicos u “obesógenos”, definidos como sustancias químicas que pueden representar un riesgo de interrupción de las señales hormonales en el tejido adiposo.
Efectos Nocivos del Bisfenol-A BPA
- Dermatitis por contacto directo con unas sandalias que contenían bisferol-a al 1%.
- Irritación de ojos nariz y garganta en el caso de manipular biferol-a en polvo.
- Aborto recurrente en personas con algo nivel de bisferol-a
- Pubertad precoz femenina
- Obesidad o diabetes
- Hiperactividad
- Disminución de la cantidad de espermatozoides
- Alteraciones cromosómicas (síndrome de Down)
- Cáncer de mama
Tipos de plásticos y tu toxicidad
Tipo 1.- PET (Polietileno Tereftalato): EVITAR
Comúnmente encontrado en: botellas de refrescos, botellas de agua, botellas de aceite de cocina
Riesgos: Puede desprender antimonio y los ftalatos.
Tipo 2.- HDPE (Polietileno de Alta Densidad): LOS MÁS SEGUROS
Comúnmente encontrado en: galones de leche, bolsas de plástico, envases de yogurt.
Tipo 3.- PVC (Policloruro de Vinilo, Vinilo): EVITAR
Comúnmente encontrado en: : Botellas de condimentos, film transparente, anillos de dentición, juguetes, cortinas de baño
RIESGOS: Desprenden plomo y ftalatos, entre otras cosas. También pueden emitir gases de productos químicos tóxicos.
Tipo 4.- LDPE (Polietileno de Baja Densidad): LOS MÁS SEGUROS
Comúnmente encontrado en: : Las bolsas que ofrecen los supermercados para llevar frutas y vegetales y contenedores de alimentos
Tipo 5.- PP (Polipropileno): LOS MÁS SEGUROS
Comúnmente encontrado en:: tapas de galones, plásticos para almacenar alimentos, vajillas plásticas
Tipo 6.- PS (Poliestireno, también conocido como espuma de poliestireno): EVITAR
Comunmente Encontrados en: bandejas de carne, utencilios de espuma como vasos y platos desechables utilizados en fiestas.
RIESGOS: Pueden desprender cancerígenos y alquilfenoles estrogénicos.
Tipo 7.- Otros: Estos plásticos pueden ser una opción más segura, ya que pueden ser muy duraderos y resistentes a altas temperaturas ocasionando una menor lixiviación. Plásticos nuevos biodegradables a base de plantas, como PLA (ácido poliláctico) también entran en la categoría Nº 7.
Según el tipo, tenemos según su toxicidad:
- Tipo 7: Puede liberar bisferol-a en su contenido.
- Tipo 3: Puede liberar bisferol-a en su contenido así como ftalatos.
- Tipo 6: Puede liberar bisferol-a en su contenido.
Libera Estireno: es un componente químico potencialmente tóxico que se libera al guardar o someter estos plásticos a temperaturas superiores a 80ºC. Puede llegar a dañar el sistema nervioso. - Tipo 1: Estas botellas se han de usar una sola vez o sino habrá liberación de bisferol-a en su contenido
Uso correcto de los plásticos
- No se debe calentar recipientes plásticos, estos no deberán contener bebidas calientes y no se deben lavar en el lavavajillas.
- No poner líquidos o alimentos calientes.
- No lavarlos con agua caliente ni usar detergentes fuertes.
- Deshacerse de los plásticos viejos rayados u opacos.
- Usar juguetes libres de PVC.
- Evitar que los bebés se lleven plástico a la boca.
Les dejamos este interesante video de un documental realizado en España, acerca del Bisfenol A.