Kimi Raikkonen hizo el domingo una carrera brillante para ganar el Gran Premio de Australia con Lotus en un emocionante inicio de la nueva temporada de Fórmula Uno en el circuito de Albert Park, en Melbourne. En la imagen, (De I-D) el director de operaciones de pista de Lotus Alan Permane; el piloto de Ferrari español Fernando Alonso; el piloto de Lotus finlandés Kimi Raikkonen, y el piloto alemán de Red Bull Formula Sebastian Vettel, con sus trofeos en el podio tras el GP de Australia, en el circuito de Albert Park, Melbourne, el 17 de marzo 2013.
Kimi Raikkonen hizo el domingo una carrera brillante para ganar el Gran Premio de Australia con Lotus en un emocionante inicio de la nueva temporada de Fórmula Uno en el circuito de Albert Park, en Melbourne.
El finlandés, campeón del mundo en 2007, cabalgó hacia la victoria con una estrategia de dos paradas en boxes y cruzó la línea de meta 12,4 segundos por delante del Ferrari de Fernando Alonso.
El triple campeón mundial, el alemán Sebastian Vettel, acabó en tercera posición con su Red Bull tras luchar con el desgaste de los neumáticos durante toda la carrera.
Algunas lluvias ligeras contribuyeron a darle emoción a la carrera, en la que los principales pilotos se enzarzaron en intensas batallas que hacían cambiar con sorprendente frecuencia las primeras posiciones.
Siete coches lideraron la carrera en algún momento pero después de que Raikkonen se pusiera al frente por segunda vez en la vuelta 43, parecía que sólo un problema mecánico le iba a impedir ganar su 20º gran premio para empatar en el recuento global con su compatriota Mika Hakkinen.
“He tenido un coche muy bueno todo el fin de semana”, dijo Raikkonen, ex piloto de McLaren y Ferrari que regresó a la F-1 el pasado año tras pasar dos en años en los rallyes, en el podio de campeones.
Ha sido la primera victoria de inicio de temporada para el equipo Lotus desde que el americano Mario Andretti ganó el Gran Premio de Argentino en 1978.
