Su creador, Daniel S.Arranz, tuvo la idea de dibujar a Rajoy, Rubalcaba, Botella y compañía como si fueran protagonistas corruptos de una entrega del GTA para protestar por la situación actual del país, que ha perdido cualquier signo de confianza con sus políticos.
“Fue un desahogo”, comenta Daniel, guionista de 37 años en paro que ha trabajado durante 10 años para las cadenas de televisión más importantes del país y que ahora cuida de sus dos hijos de 1 y 3 años mientras dibuja en sus ratos libres. Su creación, en un principio desapercibida, se ha convertido de repente en un fenómeno en las redes sociales (“todo por una mención en Twitter”).