Con el objetivo de lograr una mejor calidad del aire, sobre todo en los grandes núcleos de población, el Gobierno está estudiando cambiar el impuesto de circulación que pagan anualmente todos los propietarios de vehículos a los ayuntamientos. En el nuevo sistema impositivo ya no se pagaría en función de los caballos fiscales sino según lo contaminante que fuera el vehículo.
Así, los automóviles más ecológicos se beneficiarían de un gran descuento en este impuesto, mientras que los propietarios de los coches más contaminantes tendrían que desembolsar mucho más de lo que pagan ahora. En realidad, con un parque de vehículos que tiende a envejecer, los que terminarían pagando los tramos más altos del impuesto serían los coches más antiguos, ya que son los que resultan más contaminantes.
Actualmente, se calcula que cerca del 20% del parque de vehículos produce el 80% de la contaminación, con lo cual, sería justo que estos automóviles tuvieran unos tipos impositivos más altos para incentivar el “relevo generacional”, ya que incluso los coches más contaminantes de hoy en día se fabrican con unas normativas mucho más estrictas en cuanto a la emisión de partículas y otros compuestos nocivos que las que regían hace 10 años.
Pero la idea del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente es ir mucho más allá con esta reforma, incluida en el borrador actual del Plan nacional de calidad del aire y protección de la atmósfera 2013-2016. Por ejemplo, los ayuntamientos tendrían potestad para limitar o prohibir la entrada de coches altamente contaminantes a las ciudades durante episodios de alta contaminación.
También se podrían crear “zonas de bajas emisiones” a las que solo podrían acceder los usuarios de los vehículos más limpios y ecológicos. Además, el plan contempla otras medidas como la reducción de la velocidad en las vías de entrada a las ciudades y la inclusión de “la contaminación y la calidad del aire” como una unidad temática de estudio en las enseñanzas secundarias.
Madrid ha sido la primera ciudad en apostar por algo similar. Y es que la alcaldesa Ana Botella ha anunciado que los coches más contaminantes pagarán más en parquímetros a partir del año 2014. Una medida que puede ser imitada por otros consistorios próximamente.
