Las autoridades medioambientales de Río de Janeiro se encuentran estupefactas después de comprobar in situ el devastador panorama de una tragedia ecológica acaecida en el lago conocido como Rodrigo de Freitas. De la noche a la mañana el lago ha aparecido infestado de peces muertos. Pero no por una cantidad tristemente considerable. Sino por un volumen directamente monstruoso.
Un total de 65 toneladas de peces ha emergido a la superficie cubriendo las aguas de un manto de muerte. “Water became deoxygenated”, es la causa oficial de la tragedia.
Como macabro añadido se da la triste circunstancia de que el lago Rodrigo de Freitas es el emplazamiento elegido para albergar la competición de remo en los próximos Juegos Olímpicos de Río 2016.
No es la primera vez que este lago sufre una experiencia parecida ya que en 2009 las autoridades locales tuvieron que retirar de las aguas varias toneladas de peces muertos.
No parece, pues, la imagen más alentadora de unas aguas que un día ilustrarán el llamado Espíritu Olímpico.